En los columpios de madrugada

Me aburría demasiado en el internado, y aunque estuveiera sola era más divertido ue estar encerrada. Por lo que me había escapado y había salido tan tarde. No había nadie y parecía un poco sinietro pero no me asustaba. Me sente en el columpio, me puse mi iPod y comence a balancerame.

No habia pegado ojo en toda la noche a si que me habia pirado (como de costumbre xD) a dar una vuelta por ahi, todavia no habia amanecido, pero no quedaba mucho para que lo hiciera.
Nadie por las calles, lo normal a estas horas, salvo una chica balanceandose en un columpio y con los cascos puestos.
Me sente en el de al lado sin decir nada.

Noté como un chico, muy mono para ser sincera, se sentaba en el columpio de al lado. Me quité el casco que pegaba a su lado - Hola - saludé simplemente, sin parar de balancerame.

Genial, otra que tenia ganas de hablar, la gente de aqui era muy charlatana.
-Hola. Dije mirando hacia delante y empezandome a balancear suavemente.

Parecía un poco borde... me mordí el labio inferior. No estaba segura de si debía o no hablarle, pero si no le gustaba hablar que no se hubiera acercado - Soy Summer - dije presentandome, sonriendo.

Escuche como se presentaba, bueno esto pasaba ya de castaño oscuro, y como siempre no iba a presentarme, parecia que aqui todo el mundo estaba necesitado de amigos o algo asi.
-A pedido algui... Le iba a soltar una frase tipica de mi y de mi genio, pero al mirarla me caye. Segui balanceandome.

Se quedó a mitad de frase, si era un borde... y para mi suerte el segundo que me encontraba fuera del internado. - ¿Qué pensabas decir? - le dije, encarandome e hinchando los mofletes como una niña pequeña enfadada.

¿Se me estaba poniendo chula? ¿a mi?. Rei ironicamente, habia tratado de callarme y lo volveria a intentar, pero como volviese a decir algo fuera de lugar...
Mire con el entrecejo ligeramente fruncido cuando ella se me encaro.

Aquel tipo era bastante molesto - Te he echo una pregunta - dije soltando el aire de mi boca y mirandole fijamente. No era una cobarde, y él no me asustaba. Para hacerle hablar le empecé a molestar - ¿Oh es que tienes problemas en los oidos?

Hice un gesto molesto a posta, su voz era mas irritante de lo que parecia al principio. Segui sin moverme ni decir nada, tal vez asi acabaria cayandose. Me parecia extraño que me comportase de esa manera, cada vez controlaba mejor mi genio.

Oh que insoportable era, pillé la indirecta y me puse de nuevo el casco, no sin antes hablar - Subnormal... - dije susurrando, aunque no estaba segura de que me escuchara. Seguí escuchando mi música y me empecé a balancear más fuerte por la impotencia que sentía por no poder hacerle hablar.

Solte unas sonoras carcajadas ironicas a posta antes de que se colocase el casco. Murmuro algo que no logre escuchar, pero me imagine que me estaria felicitando las navidades. -Niñata... Murmure volviendome a balancear.

Esto era superior a mi, de normal era una chica amable que se llevaba bien con casi todos... y él, aggg que antipático. Después de unos minutos en silencio me volví a quitar el casco - ¿No piensas decir nada? - le dije, de la misma manera que el había echo un intento de hablarme.

Aprete los labios con fuerta evitando soltar cualquier cosa desagradable por puro impulso. Da igual que no hablase, ella no callaba.
-¿Y tu no te cansas de hablar sola?. Dije alzando una ceja.

Abrí los ojos y sonreí - Estaba segura de que eras capaz de formar una frase entera - dije riendome y después le contesté - En realidad, no lo hago a menudo - le dije, simplemente.

-Pues parecias con bastante experiencia. Dije con tono serio y a la vez burlon mirando hacia delante. ¿Ahora iba de simpatica? no entendia nada. Pues yo no me iba a hacer pasar por un chico simpatico cuando ya me habia tocado las narices.

Le miré incredula - ¿Y tú eres así de antipático siempre? - le pregunté. No me gustaba ser borde con nadie pero él era imposible. Me balanceé pero bajé un poco el ritmo.

¿Antipatico? ¿yo? ¿la persona mas adorable del mundo? precisamente por ser tan bueno me habia dejado encerrar aqui. Me encogi de hombros a causa de mis pensamientos, vale, era borde, pero bajo el caparazon en el que me refugiaba era una persona amable. No conteste sabiendo que eso le molestaria.

Resoplé moviendo mi flequillo hacia arriba. No dije nada más, si él no quería hablar yo tampoco lo haría. Cambié de canción a una más fuerte que me quitara de pensar en el payaso que tenía al lado, me volví a poner el casco que me había quitado y continué balanceandome.

Parpadee muchas veces seguidas, no daba credito ¡se habia callado! bien, pues ahora me tocaba a mi.
Me acerque a ella y le quite un casco, podia oir su musica a distancia. -Niña bonita. Dije burlon. -Si no bajas esa musica te vas a quedar sin poder escuchar mi aterciopelada voz. Añadi sonriendo falsamente, estos comentarios me superaban.

Estaba inmersa en la canción, había intentado centrarme solo en la canción cuando se acercó y me quitó el casco - Solo sería una bendición - dije refiriendome a quedarme sorda. Si quería ser borde lo tendría que ser yo tabién, casi nadie me ganaba a nada que me propusiera. Aunque de todas formas bajé el volumen, le cogí el casco de la mano y me lo puse en la oreja.

Volvio a ponerse su estupido casco, bah no merecia gastar saliva en un caso perdido como lo era ella. Volvi a sentarme en el columpio y me balancee fuerte, de mala leche.

Vi como se baanceaba - Si sigues asi acabarás lejos - dije medio riendome, pero aún enfadada. Sabía que le había molestado lo que había echo pero merecía tomar de su propia medicina. De repente se apagó mi iPod, se había quedado sin bateria - Mierda, mierda y mierda... - dije mirandolo y apretando fuerte para volviera a ir, en vano.

Pare de balancearme y la mire fijamente. -Ojala, asi por lo menos no escucharia tu voz tan irritante. Frunci el ceño, para chulo y borde estaba yo. Empezo a maldecir y no pude soltar una sonrisa de satisfaccion. -El karma te lo esta pagando. Dije riendo, no creia en ese tipo de tonterias, pero algo tenia que decir.

Rodé los ojos ante su primer comentario. Luego le contesté al segundo - Únicamente es que se me olvido cargarlo anoche - dije, aún más cabreada. Hinché los mofletes, era un rasgo mio y me callé guardandolo y cruzandome de brazos.